martes, 23 de octubre de 2012

POIO 2 - 1 SPORTING PORTONOVO

La mala suerte y las ocasinoes falladas condicionan el resultado final.


La tarde del domingo se presentaba perfecta para la práctica del futbol, y a pesar de que el campo de hierba natural no estaba en las mejores condiciones, el ambiente en las gradas era envidiable.
 
En el once inicial del Sporting jugarían: Fonso, Andrés Melo, Javi Melo, Manu, Sami, Bouzada, Bruno, Ferre, Nichera, Copi y Alexis.
El banquillo: Sergio, Cristian, Patxi, Adri y Yago.
Comenzaba el partido con buenas sensaciones ante uno de los equipos fuertes de la cateregoría, ejerciendo una muy buena presión sobre la salida de balón del contrario que propiciaría numerosas recuperaciones en medio campo y facilitaba el trabajo de la defensa que sólo tenía que estar atenta a los balones en largo, que con mucha seguridad y criterio conseguian sacar sin mayor peligro.
El Sporting con Alexis en punta de ataque como hombre rápido, aprovechaba para meter balones en largo a las espaldas de la defensa del Poio, que tal y como sabiamos según los informes del cuerpo técnico, eran jugadores fuertes fisicamente, pero fallaban por alto y no se complicaban ante la presión.
Sólo hubo que ajustar las marcas sobre el medio centro del Poio, para que éstes dejasen de elavorar su juego ofensivo e impedir la sálida comoda de balón.
La buena presión y el sacrificio colectivo hicieron que el Sporting gozase de las mejores ocasiones durante casi todo el encunetro, fruto de ello llegó el gol de Ferre, que escelentemente colocado llegando desde segunda linea en un balón colgado al área y mal rechazado, colocaría el esférico en un lugar inalcanzable para el portero local.
El 0-1 en el marcador venía a hacer justicia sobre lo que se estaba a presenciar en el campo. Si bien una serie de actuaciones un tanto dudosas por parte del colegiado, perjudicando claramente al Sporting, al pitar varios fueras de juego inexistentes, pusieron un poco de nerviosismo sobre el campo, los jugadores supieron mantener la concentración y siguieron peleando para aumentar el resultado.
Por contra en una jugada tonta en la que nada podía hacer el interior derecho del Poio para recuperar el balón, lanza una brutal patada por detrás a Nichera que lo saca del campo amonestado con tarjeta roja directa.
Todo parecía de cara antes de llegar al descanso, controlando los ataques desesperados del rival y los balones colgados de jugadas a balón parado, donde demostramos estar muy atentos.
Con las consignas oportunas por parte de Josiño, en las que hacía incapié en aguantar los primeros minutos de la reanudación a la fuerte presión a la que nos sometería el rival, saltó el equipo con la misma disposición pero con diferente fortuna.
El equipo seguía aguantando y recuperando cantidad de balones, y trenzando jugadas que ponian al límite la velocidad de la defensa del Poio, que una y otra vez se tenían que medir con Alexis, Nichera o Ferre, o con internadas espectaculares como la de Copi librandose de tantos jugadores como le venian al paso, con la mala fortuna de no estar atinado para sentenciar el partido.
El enorme trabajo defensivo que el equipo estaba desplegando se volvió a encontrar otra vez con la mala fortuna en una jugada tonta y sin aparente peligro en la que el Poio iguala el marcador.
Tras unos minutos de desconcierto por parte de todos, y que incluso afectó al arbitro al que por momentos parecía irsele el partido de las manos por falta de caracter, el Sporting se repuso y volvió a controlar las embestidas del Poio que parecía tener mas el balón pero sin conectar con sus delanteros.
Por contra el Sporting sin trenzar tanto las jugadas si conseguía encontrar las espaldas de los defensas, pero no atinaba en los remates ni en los centros, o se veía frustrado con faltas y fueras de juego muy dudosos.
El Poio que sólo conseguía pisar el área con jugadas a balón parado se topó con un gol de chorra de lanzamiento lejano que pilla a Fonso a contrapié, adelantandose en el marcador habiendo tirado 2 veces en todo el partido entre los tres palos.
En el último tercio del encuentro, lejos de tirar la toalla el Sporting siguió peleando cada balón y cerca estubo de lograr el empate de no ser por larguero en un sensacional lanzamiento de falta votado por Manu, en el que nada podría haber hecho el portero. Pero al final no hubo tiempo para más. El partido entró en una fase de juego sin sentido, con las fuerzas muy justas por parte de los dos equipos que se habían vaciado en el campo durante 90 minutos para deleite de los seguidores que asistieron al partido.
Saludos al público, cruces de manos y al vestuario con la amarga sensación de que mereciamos mejor fortuna y mejor resultado.
A destacar la enorme sacrificio, entrega y solidaridad por parte de todo el conjunto para afrontar éste partido ante uno de los que a buen seguro acabarán arriba en la tabla al finalizar la liga.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

pero tu que partido miraste?si no le sabeis dar a 1 piedra y con 1 de menos desde el minuto 15

poiohooligan dijo...

La naranja mecánica os llaman, menudas jugadas trenzadas JAJAJAJAJAJA

Anónimo dijo...

la expulsion no fue antes del gol de portonovo?creo que fue 1 jugador del sporting que tras finalizar el partido y intento lanzar la pelota a la grada...